Una vez que hayamos puesto al menos un checkpoint,
podremos hacer un Test drive para ver cómo ha quedado, y corregir
cualquier fallo existente. Por último, sólo nos queda guardar para poder
jugar carreras corrientes, Stunt-Shows o Wrecking Matchs en nuestro
propio escenario. Y no sólo eso: también podremos editar los ya
existentes. La verdad, no hay manera más últil de aprender a usar el
Track Editor que la experimentación.
Si nos hartamos de
los contrincantes controlados por el CPU, siempre nos quedará la opción
multijugador, el cual nos permitirá conectarnos a la red y jugar contra
otros jugadores como nosotros. Así conseguiremos intensificar la
experiencia de juego, ya que los que estén al volante de los otros
vehículos serán conductores al otro lado de nuestro ordenador que, como
nosotros, sólo ansian con arrasar todo lo que se encuentre delante del
morro de sus vehículos.
Sin tiempo para vacilaciones, nos encontramos ante uno de los mejores juegos de destrucción masiva al volante, que no defraudará a ningún jugador que quiera pisar el acelerador mientras aprieta el gatillo de un arma o lanza misiles al mismo tiempo. Un juego que a pesar de su simplicidad consigue causar afición a cualquiera, y que por lo tanto puede ser definido sólamente por una palabra: impresionante.
Lo mejor:
- Buen potencial gráfico
- Trabajados impactos en el coche
- Impresionantes saltos y explosiones
- El hecho de que el juego traiga sólamente 12 coches consigo (Aunque podemos añadir nuevos)